Derecho reservado

Te reinvento en este día
patento tu sonrisa, registro tu ternura.
Es mi derecho esta felicidad de crearte
y creerme feliz por un instante;
la lágrima no me pertenece.
Convocarte es plagiar los sueños.
Y debo decir
que sólo es de mi autoría: que me sueñes.
Lo demás lo niego, soy incapaz de olvidarte.